miércoles, 5 de agosto de 2015

Decoración de bodas primaverales

Durante el coctel puedes crear rincones gourmets que ofrezcan a los invitados deliciosos aperitivos, pero siempre ligeros. Puesto que esta época del año invita a ofrecer a los asistentes menús más livianos dadas las temperaturas, más elevadas que en otras estaciones. 

En la celebración de una boda en primavera son de obligada presencia las flores. Y es que es, precisamente, durante esta época del año cuando la naturaleza alcanza su apogeo máximo. Puedes emplearlas, por ejemplo, para decorar el paseíllo camino del altar colocándolas en las sillas aledañas o echando pétalos de flores sobre la alfombra.

Otra idea decorativa es emplear las flores para adornar determinadas zonas del banquete. Así, por ejemplo, puedes colocar flores de temporada en la zona destinada al cóctel, o colocadas estratégicamente sobre el jardín.


Respecto a la decoración de las mesas, el lugar que vayan a ocupar tus invitados se merece una atención especial. Aprovechando la estación en la que nos encontramos puedes elaborar bonitos centros de mesa con flores de temporada, colocar originales jaulas antiguas de estilo vintage o, por ejemplo, elaborar centros de flores secas.

Asimismo, puedes aportar un toque de originalidad a la decoración de las mesas imprimiendo una original forma a tus servilletas. En cuanto a la decoración de las sillas, te recomiendo que te decantes por una decoración sencilla en la que los lazos de colores cálidos, pequeños ramilletes o el tul son una apuesta segura.

La luz es también un elemento importante. La primavera es sinónimo de luz y qué mejor que dotar a tu boda de un toque de luminosidad acorde a esta estación. En este caso, la luz juega un papel fundamental, especialmente, cuando cae la noche. En ese caso, puedes colocar farolillos antiguos repartidos por los árboles, colocar globos de papel con una bombilla LED y distribuir estratégicamente globos de diferentes tamaños por el exterior. Otra de las opciones es decorar tu boda con velas. 


La distribución de las mesas constituye otro elemento esencial. Para que los invitados conozcan el lugar donde van a sentarse puedes habilitar un espacio en el que las pizarras muestren dicha distribución. Estas pizarras pueden estar colocadas a su vez sobre un centro floral para imprimir un toque 100% primaveral.

Por último, uno de los rasgos principales de la primavera es el color. El color que impere en la boda puede representar uno u otro significado. Entre las tendencias de 2014 puedes elegir entre el azul deslumbrante, el tulipán violeta, que evoca nostalgia; el orquídea radiante, la celosía naranja, un tono espontáneo y optimista; fresia, cayena, azul plácido o gris claro, que debe ser combinado con otro tono para que resalte; y, el color arena.

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